Constance Ephelia está situado en la isla de Mahé pero eso no impide realizar excursiones a las vecinas islas de La Digue y Praslin.

No hay dos islas iguales y cada isla tiene su propia joya escondida, atracciones imperdibles, hermosas playas y experiencias únicas. Las Seychelles, un archipiélago de 115 islas salvajes, tienen un encanto natural incomparable y ofrecen un sinfín de lugares para visitar.

La primera vez que visité las islas Seychelles sabía que, como un primer amor, nunca las olvidaría, y así como quien no quiere la cosa, volví en repetidas ocasiones gracias a la proximidad de mi hogar, Madagascar.

¿Qué tiene de especial este archipiélago? Miles de adjetivos podrían responder a esta pregunta: playas de aguas turquesas, arenas blancas, peces de colores, enormes palmeras, lujosos alojamientos donde jurarnos amor eterno… efectivamente así es, pero lo que más me impacto de estas islas es su capacidad de hacernos olvidar el resto del mundo y de los mortales. Las preocupaciones, el estrés o la ansiedad desaparecen desde que pones un pie en las islas y opera la magia.

QUÉ VISITAR EN SEYCHELLES

Mahé, La Digue y Praslín

Se trata de las tres islas con más infraestructura hotelera del archipiélago, aunque existen también pequeñas islas privadas-hotel de cadenas de lujo internacionales. La mayor y más animada es Mahé, donde se encuentra la capital Victoria y las paradisíacas playas de Anse Intendance o Anse Major. También es la que recibe todos los vuelos internacionales que llegan al país.

La segunda en tamaño es la isla de Praslin, sin duda la que posee más atractivos naturales como  el Parque Natural Vallée de Mai, célebre por el “Coco de mer”, la semilla más grande del planeta. También es reputada por albergar las playas de Anse Lazio y Anse Georgette, que están clasificadas entre las más bonitas del planeta.

Y, por último, un pequeño tesoro, La Digue la isla más paradisíaca de las tres. Playas como Anse Cocos, Anse Severe, Petite Anse y por supuesto no me olvido se Anse Source d’Argent , sin duda la más famosa de Seychelles y que fue nombrada la playa más bonita del planeta en 2020. También es célebre por sus ricos fondos marinos donde realizar snorkel o bucear.

La playa de Beau Ballon en Mahé

Se trata de una de las playas más grandes y populares de Mahé  que  sin embargo no ha perdido ni un ápice de su encanto. Se trata del lugar con más infraestructura hotelera y servicios turísticos de la isla. Es fácil encontrar buenos restaurantes donde disfrutar de una buena cocina criolla, hindú o italiana.

Vallée de Mai en Praslin

Hogar del “Coco de mer” (Lodoicea Maldivica), la semilla más grande del mundo, la Reserva de la Vallée de Mai fue declarada Patrimonio de la Humanidad por UNESCO y se extiende a lo largo de 19 hectáreas.

Previo pago de una entrada encontraremos senderos debidamente señalizados que transcurren entre palmeras y numerosas plantas endémicas.

La Playa de Anse Lazio en Praslin

Hay que decir que en Seychelles la competencia es dura en cuanto a playas se refiere, pero esta pasa por ser la segunda mejor del archipiélago. Exuberante vegetación que desemboca en el mar, grandes rocas graníticas de tonos ocres, arenas blancas y aguas turquesas: una de las mejores postales de Seychelles.

Visitar alguna de las islas desiertas

115 islas forman el archipiélago de Seychelles y aunque lo habitual es visitar Mahé, Praslin y la Digue, hay otras pequeñas islas deshabitadas como la isla de Curieuse, al norte de Praslin célebre por ser uno de los dos únicos lugares donde crece el “coco de mer” (el otro es Praslin en el Vallée de Mai). La diminuta isla de Saint Pierre es una idílica isla desierta donde realizar esnórquel.

También merece una visita la isla de Cousine, refugio de la tortuga terrestre gigante de Aldabra, uno de los emblemas del archipiélago. Este centro de conservación acoge actualmente a 78 tortugas gigantes.

Bucear en Seychelles

Se dice que estas islas son el paraíso en la tierra y añado que también lo es bajo el mar. Cualquier época es buena para realizar buceo en Seychelles, aunque los meses de abril, mayo, octubre y noviembre son especialmente recomendados gracias a la buena visibilidad.

Tortugas marinas, tiburones, rayas, peces globo… así como intensos corales son visibles fácilmente. Los que no realizáis buceo podréis disfrutar igualmente de los magníficos fondos marinos realizando snorkel en el parque marino de Sainte Anne, o el Islote del Coco o en prácticamente cualquier lugar del archipiélago.

Trekking hasta la playa de Anse Major

Uno de los senderos de montaña que vale la pena recorrer hasta la recóndita playa de Anse Major, sin duda la mejor playa de Mahé. La ruta es espectacular, alterna espacios abiertos con otros de bosque húmedo denso totalmente cubierto por la vegetación y bloques inmensos de granito.

Senderismo en el Parque Nacional Morne Seychelles

El Morne, es el pico más alto del archipiélago con 905 metros de altitud. Podremos ascender por tres vías distintas, la Trois Frères es bastante sencilla y se obtienen fabulosas vistas desde el punto máximo (699 metros). La Morne Blanc de poca dificultad aunque en continua subida ofrece unas vistas de escándalo. Estas rutas pueden recorrerse en aproximadamente 2 horas. Para quienes deseen culminar el pico (905 metros) es necesario prever unas 5 horas y chubasquero por si nos sorprende la lluvia.

Anse Source d’Argent, la playa más bonita del mundo.

Así fue catalogada el pasado 2020 y no nos extraña. Para acceder a ella hay que pagar entrada a la plantación de coco y vainilla de Union State que nos conducirá directamente hasta la playa. Una estampa que permanecerá en nuestra memoria durante toda nuestra vida.