¿Por qué es famosa la Avenida de los baobabs?
Porque observarla es como volver a la niñez, más concretamente al cuento de El Principito. Una imagen que sobrecoge y emociona a todos y cada uno de nuestros viajeros. Hay algo que te hace “clic” cuando estás allí. No te vayas sin abrazar a uno de ellos, te aseguro que operará la magia.

¿Qué es un árbol baobab?
En el mundo existen 8 especies de Baobabs, de ellas, 7 se encuentran en la isla de Madagascar, y 6 son endémicas. Los baobabs son malváceos, de la familia de las bombacáceas. Según palabras del mayor especialista de baobabs de Madagascar en vida (Cyril Cornu), en contra de lo que se cree muchas veces, el baobab no es un árbol, es una planta. Aunque literariamente, queda más bonito referirnos a ellos como árboles.
Los baobabs están considerados la flora más espectacular del mundo. Se trata de plantas hermafroditas, caducas, con un tronco más o menos en forma de botella de entre 5 y 30 metros de largo. Su madera es muy ligera y puede contener hasta un 75% de agua en su interior.
Todas las especies de Madagascar poseen unas características morfológicas similares. Las hojas caen en la estación seca malgache. Al suprimir las hojas reducen la transpiración y la necesidad de agua. Los afloramientos les pueden llevar a desarrollar formas extraordinarias que les han rodeado siempre de mitología y misterio. Las flores son grandes y se abren justo antes o durante el crepúsculo y emplean entre 30 segundos y media hora dependiendo de la especie. Estos movimientos son visibles al ojo humano.
Hace 160 millones de años, tras la Pangea, Gondwana era un super continente formado por América del Sur, India, África y Australia. Su separación provocó la deriva de los continentes. Hace 70 millones de años, Madagascar se separó de la placa Indo asiática y se colocó en su posición actual. Algunas especies, tanto de plantas como de animales, evolucionaron de manera diferente en la isla, hasta conformar un ecosistema único en el mundo.
La palabra Baobab viene del árabe “ba hobab” o “bu hibab” (que significa fruto con muchos granos) y la primera vez que se tiene conocimiento de la misma es en el año 1592, cuando aparece reflejada en el Libro de Plantas de Egipto, donde se dice que podían encontrarse sus entonces extraños frutos en los bazares de El Cairo.

¿Cómo se “crearon” los baobabs?
El proceso reproductivo de los baobabs de Madagascar se interrumpió hace aproximadamente 300 años. La depredación de frutos y semillas por parte del ser humano, los incendios provocados y la degradación del ecosistema, así como la introducción de especies invasoras podrían ser los factores responsables de esta tragedia, vinculada directamente a la presencia del Hombre en la isla.
Posiblemente en el pasado, fueran el Archeolemur y el Aepyornis (pájaro elefante)- ambos extinguidos con la llegada del ser humano a la isla – los encargados de esparcir las semillas del baobab ayudando a su reproducción. No hay que olvidar que la germinación de las semillas de baobab, es un proceso muy largo.
La mayor concentración de baobabs de la isla se halla en la zona Oeste, concretamente en el Parque Nacional de Kirindy-Mitea, no confundir con la Reserva de Kirindy.
Los malgaches llaman a esta avenida Ankorondrenala (dónde hay muchos baobabs).
En un país económicamente subdesarrollado como Madagascar, las comunidades rurales dependen en gran medida de los recursos naturales para asegurar su subsistencia, y eso implica métodos de agricultura tradicionales basados en la cultura de la tala y la quema.
La explosión demográfica que ha sufrido la isla en las últimas décadas y la falta de acceso a fuentes de energía modernas por parte de la población son otro de los factores de riesgo.
Desde los años noventa del siglo XX se han creado en la isla más de 20 reservas naturales y 7 parques nacionales, aunque todavía no es suficiente para ser optimistas en cuanto a la suerte que correrán estos árboles milenarios en el futuro.

¿Cuál es la leyenda del árbol baobab?
Para los malgaches el baobab es un árbol sagrado. En muchas comunidades del oeste y del sur de la isla, los consejos de ancianos se sientan a deliberar a la sombra de uno de estos árboles milenarios. Es lo que ellos llaman “la casa de la palabra”. También las mujeres jóvenes comparten sus historias y chismorreos bajo la sombra de estos magníficos gigantes, y muchas veces sirven incluso como lugar de reunión para festividades y ceremonias de iniciación, así como improvisados conciertos musicales.
Muchos malgaches creen que “kokolampo”, el espíritu del bosque, vive en el interior de los baobabs, al igual que las almas de algunos ancestros, de ahí que estos árboles sean sagrados para algunas comunidades del sur y oeste de la isla.
Las leyendas populares cuentan que el baobab, el llamado árbol maldito porque desafió a los Dioses, vivía en un lugar muy húmedo, en las costas del Este de Madagascar, pero siempre estaba molestando al Creador con sus lamentos y quejas. Los dioses de la Naturaleza, furiosos, lo arrancaron de su hábitat y lo lanzaron al otro extremo de la isla, a las áridas tierras del oeste malgache, con tan mala suerte, que aterrizó del revés y quedó condenado para siempre a tener visibles sus raíces. De ahí que en la mitología local se le llame el árbol invertido. Pero también se le llama Renala o Reniala, “la madre de la selva”.
Hay un proverbio malgache que reza así: “es más difícil arrancar un baobab del jardín del vecino que una mala hierba del propio”.
¿Para qué se utilizan los baobabs?
La población malgache utiliza la corteza, el fruto, las flores y las hojas, aunque no la madera (de mala calidad para construcción y resistente al fuego), lo cual ha propiciado hasta ahora que las especies de baobab endémicas de la isla no hayan desparecido, y aunque amenazadas por su falta de reproducción, den lugar a una ligera dosis de esperanza. También es utilizado como aljibe por la etnia Mahafaly y a partir de la pulpa se elabora el famoso polvo de baobab, un superalimento muy de moda actualmente.

Las seis especies endémicas de Madagascar
Estas son las 6 especies endémicas de Madagascar todas ellas repartidas de norte a sur pero exclusivamente en la zona oeste de la isla: Adansonia Madagascarensis, Adansonia Za, Adansonia Rubrostripa Fony, Adansonia Grandidieri, Adansonia Perrieri y Adansonia Suarezensis.
Las otros dos especies restantes, Adansonia Digitata (baobab común africano, presente también en el continente y en Madagascar), Adansonia Gibbosa (baobab australiano).
A todos los baobabs se les conoce como Adansonia, en honor al explorador y naturalista francés Michael Adanson que escribió sobre ellos en el siglo XVIII, al divisarlos cerca de las costas de Senegal.

¿Qué edad tienen los árboles de la Avenida de los Baobabs?
Los baobabs más viejos pueden superar fácilmente los 1.000 años, aunque muchos pueden llegar incluso a los 1.500 años. La mayoría de los baobabs de la Avenida rondan los 800 años. El crecimiento varía según el tipo de terreno, el clima y la especie y puede ir de unos pocos centímetros hasta uno o dos metros al año durante su juventud. Y su crecimiento es el mismo hacia arriba que bajo tierra, de ahí que algunos estén tan bien arraigados que resisten a huracanes y ciclones tropicales.

¿Hay otras Avenidas de Baobabs en Madagascar?
En Madagascar destacan por encima de todos los baobabs Andansonia Grandidieri de la Avenida de los Baobabs (Akorondrenala o asamblea de baobabs), tanto por su altura, su tamaño, su longevidad y por sobre todo por la gran concentración de esta especie alineados en perfecto orden de formación, como un ejército floral, en un paseo de unos 2 kilómetros de largo.
Pero no son los únicos, de hecho todo el oeste de Madagascar de norte a sur está plagado de Baobabs. También son espectaculares los baobabs del « Bosque Encantado », bautizado así por miembros del staff de IndigoBe hace muchos años, cuando los descubrieron en un viaje de prospección. Este bosque de baobabs (Adansonia Grandidieri pero de morfología distinta a los de Morondava) se halla muy cerca de Andavadoaka, en la pista que va hacia Morombe, en el oeste malgache.
En el sur de la isla, cerca de Ifaty, hallamos la Reserva de Reniala, donde también nos sorprenden grupos de baobabs de la especie Adansonia Rubrostripa, llamado en malgache Fony, considerado el baobab botella por excelencia, y en el que se inspiró Saint Exupéry para ilustrar su libro El Principito.

Tsitakakantsa, el Baobab más grande de Madagascar, no está en la Avenida de los Baobabs
Se trata del baobab más grande Madagascar y posiblemente uno de los mayores del mundo. Posee 30 metros de circunferencia. Se trata de un Adansonia Grandidieri al que se le calculan más de 1.500 años. Ubicado cerca de Morombe, a partir del desvío de Mangalavolo, las pistas de arena nos llevarán en algo más de 1 hora de 4×4 hasta uno de los lugares donde se hallan algunos de los baobabs más grandes de la isla. Este es un baobab sagrado, y para acceder a él, deberemos realizar una ceremonia de desagravio a los ancestros o « fomba » en compañía de los notables del poblado sakalava menabe.

Otros baobabs
Impresionantes por su variada morfología son los Adansonia Suarezansis que podemos encontrar ascendiendo a la Montaña del Francés, cerca de Diego Suarez, en el norte de la isla. O el Gran Baobab de Majunga, de la especie Adansonia Digitata (que compartimos con el continente africano).
También en la cuenca del río Mangoky, o en las orillas del río Tsiribihina podemos encontrar gran variedad de baobabs de varias especies.
En el extremo sur y en el Parque Nacional de Zombitse destacan entre otros los de la especie Adansonia Za.
¿Dónde está ubicada la Avenida de los Baobabs?
Este grupo de baobabs Adansonia Grandidieri se encuentra a 18 kilómetros de la ciudad de Morondava en la región de Menabe, en el oeste de Madagascar.
¿Cómo visitar la Avenida de los Baobabs?
Actualmente, la mejor forma de llegar es sin duda tomando un vuelo doméstico hasta la población de Morondava desde Antananarivo, ya que de lo contrario nos esperan dos días mínimo de carretera en muy mal estado desde la capital.
Una vez en Morondava, nos separan tan solo 18 kilómetros hasta la Avenida de los Baobabs a la que se debe llegar en 4×4 ya que se trata de una pista de tierra.
Consejos para los viajeros que quieran visitar el paseo más insólito de Madagascar
Todo el año es buena época para visitar la Avenida de los Baobabs, sería fantástico poder observarlos con hojas (de noviembre/diciembre hasta abril/mayo) o sin hojas (de junio/julio a noviembre/diciembre) ya que en cada estación nos presenta un paisaje totalmente distinto, con bruma al amanecer en invierno o totalmente cubiertos de hojas y frutos en verano.

Explora la Avenida de los Baobabs al completo con Indigo Be
No puedes abandonar Morondava sin visitar el poblado de pescadores de la etnia vezo-sakalava de Betania en una inmersión cultural necesaria para conocer la estrecha relación que existe entre el hombre y el mar en este rincón del oeste malgache y la Reserva de Kirindy Forest, conocida por la observación del Fosa (Cryptoprocta ferox), 30 especies de mamíferos como la Rata Gigante Saltarina (Hypogeomys antimena), 8 especies de lémures (Propithecus verreauxi, Eulemur rufrifons, microcebus berthae, el primate más pequeño del mundo, el microcebus murinus, el Phaner pallescens, el Cheirogaleus medius, o el lepilemur ruficaudatus…), 68 especies de aves, reptiles (cocodrilos, camaleones, tortugas como la Pyxis arachnoides una tortuga endémica del suroeste de Madagascar, lagartos, serpientes…) anfibios, baobabs Adansonia rubrostipa y Adansonia Za, etc. Se trata de un bosque seco y denso típico de la zona Menabe.
Si sois viajeros aventureros no os podéis perder la visita al Parque Nacional Tsingy de Bemaraha y su vertiginosa vía ferrata situado a más o menos 9 horas de ruta 4×4 de Morondava.
Algunas de nuestras rutas que incluyen la visita a la célebre Avenida de los Baobabs :
Expedición Baobab : nuestra ruta más completa por el sur y oeste malgache.
También ofrecemos una Extensión de 4 noches a la Avenida de los Baobabs visitando también Betania, sus manglares y la Reserva de Kirindy, con vuelos de Madagascar Airlines ida/vuelta desde Antananarivo.
